Piratas, id sacándole brillo a vuestras motos porque hoy os presentamos una de esas rutas de motociclismo que… ¿Hemos dicho rutas? Más bien una auténtica travesía, una espectacular aventura en la que recorreremos 700 kilómetros en un solo día y que no sabemos si os va a hacer disfrutar más dándole al gas o viendo los inigualables paisajes de nuestra provincia y, también hay que decirlo aunque no tengamos (por ahora) una weeky agenda de ocio en aquellos lares, de las vecinas.
Además, el nombre es muy llamativo. Hablamos del Reto Conguitos. Nos dicen desde la organización que no tiene nada que ver con el chocolate (muy a pesar nuestra) y sí más bien porque, tradicionalmente, el motero suele vestir ropa oscura y si a ello le sumamos el casco negro, parecía exactamente a las pequeñas bolitas de chocolate que tanto nos gustan.
Por diversos puntos de España existen rutas de este tipo, como la de los Penitentes en los Pirineos, la Rider 1.000 en Cataluña (precisamente, este fin de semana en Manresa) o la de El Desafío en Cádiz, de menos kilometraje que este Reto Conguitos que nació hace tres años tras converger en un único camino varios proyectos que surgieron a la vez para tratar de tener una ruta de motociclismo en Almería de este calibre.
El Reto Conguitos no se trata de una ruta motera en Almería al uso. No existe un itinerario que haya que seguir a pie juntillas ni las motos van en formación lineal durante el recorrido. Sí se le otorga a cada participante una hoja de ruta con indicaciones detalladas sobre carreteras recomendadas, giros y rotondas, pero luego cada uno de ellos puede elegir qué camino tomar para, eso sí, alcanzar una serie de puntos de control en los que tienen que ir sellando su particular peregrinaje. Cada motero marca su ritmo y hace las paradas que crea convenientes, ya sea para admirar el paisaje, en montaña o costa, o hacerse un selfi (¡pero jamás en marcha, por Neptuno!). Todo ello por carreteras en buen estado, evitando las parcheadas o con firme deteriorado.
En la primera edición, el Reto Conguitos se circunscribió a la provincia de Almería, pasando por la Alpujarra, por lugares como el Puerto de La Ragua u Ohanes (donde, por cierto, este domingo se celebra una carrera popular) y pasando desde allí a Los Filabres para subir a Calar Alto. Venga, que veo que se os ponen los parches de bolilla. Disfrutad de esta subida en moto a Calar Alto en la edición de 2013 y seguimos a la vuelta:
La expedición llegó entonces hasta María y regreso por las canteras del valle del Almanzora hacia el Levante, pasando por Huércal-Overa o Los Gallardos (donde, no sé si sabéis, existe un club de bowling) y llegando al Circuito de Almería en Tabernas, para la posterior cena en el Club Hípico de Almería.
El año pasado, la organización dio un paso más y sacó el Reto Conguitos de nuestras fronteras, cruzando las provincias de Granada y Murcia y llegando hasta Riópar, en Albacete, junto a los calares del Río Mundo y La Sima, al norte de la Sierras de Cazorla, Segura y Las Villas.
Del recorrido de este año, poco os podemos decir porque estará guardado como un valiosísimo mapa del tesoro en el cofre de la organización hasta el día antes del evento, pero hemos pedido parlamento y al menos sí podemos avanzaros que la comida será en Píñar (Granada). Por dónde pasará la ruta antes de llegar allí, y por dónde retornará a Almería es el gran misterio.
¿Qué tenéis que hacer para embarcaros en esta aventura? Ser mayores de edad y tener el permiso y la moto en regla. Lógico, ¿no? El coste es de 50 euros e incluye todo el material promocional así como el desayuno, la comida y la cena.
Yo de vosotros no me lo pensaba mucho, porque con solo dos ediciones se ha convertido en una de las rutas de referencia para los moteros de toda Andalucía, porque las inscripciones están abiertas hasta el día 22 de este mes y solo hay 150 plazas disponibles. Por cierto: no os hemos dicho aún cuándo tiene lugar este Reto Conguitos. Será el 6 de junio. ¡Así que corred a inscribiros y luego no os olvidéis de comentarnos cómo ha sido la experiencia!
Imágenes: Los Pelonchos
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