YELMO CINE TU BUTACA TE ESPERA

Robles, el desayuno más saludable

1

Ya he escrito en alguna ocasión sobre los desayunos del bar Mar Robles, un local de tapas del Zapillo de toda la vida que decidió mirar de frente a la crisis apostando por ofrecer desayunos saludables basados en zumos de fruta fresca y mermeladas caseras sin azúcar.

Después de tres años trabajando esta línea de negocio han conseguido fidelizar la clientela hasta el punto que casi es imposible ocupar una mesa entre las 9 y 11 de la mañana. Esta nueva clientela, fiel y comprometida con el producto, ha aportado ideas nuevas para las recetas de zumos y mermeladas y además han animado a Mar Robles y Manuel Romero, propietarios del negocio, a apostar por esa línea de negocio. En las últimas semanas las novedades del Robles son los zumos verdes, el aguacate como ingrediente en las tostadas y una carta de tapas vegetarianas y comida ecológica.

¿Qué puedes desayunar en el bar Mar Robles? Zumos recién exprimidos o licuados con frutas y hortalizas frescas de temporada, platos de fruta, tostadas de pan de varios tipos (integral, nueces, centeno…), mermeladas caseras, variedad de tés aromatizados, muesli, cereales, yogures, batidos de leche de soja con fruta, leche sin lactosa o pastas integrales.

¿Qué sabores puedes combinar en un zumo? piña, pomelo, naranja, tomate, zanahoria, apio, puerro, pera , sandía, melón… Todo depende de la temporada. Las mermeladas son caseras, sin azúcar añadido y aprovechan las mismas frutas y hortalizas que utilizan en los zumos. Combina a tu gusto y a disfrutar de un desayuno saludable, casero y rico. Otro día hablaremos de sus tapas.

Bar Mar Robles
C/ Estadio 54
950 24 02 48
Abren de lunes a domingo para desayunos
Para tapas y comidas descansan los martes

[mappress mapid=”65″]

Comparte

Sobre el autor

Es encargado de dirigir las cocinas de este galeón. De toda la tripulación, es el pirata con el sentido del gusto y del olfato más desarrollado. No hay barco pirata que surque los mares del norte y del sur que tenga mejores menús que los nuestros. Los regentes de las tabernas y mesones que frecuentamos, lo conocen tan bien como él a ellos, por eso, no pisamos un bar sin su consentimiento. Y después de tantas millas de navegación, sus descubrimientos gastronómicos aún siguen sorprendiendo nuestro paladar.