Cinco poderosas razones para enamorarnos de Antas

Ir a Antas puede hacernos conocer claves de nuestra historia aromatizados con el azahar que en primavera emborracha cada tarde. Ahí van las razones:

El Cabezo María
Un cerro visitado desde el neolítico y que es ahora receptor de la ermita de Santa María de la Cabeza al que accederemos por un sendero que es como una escalinata natural donde poder tener una visión panorámica de la zona, alfombrada de naranjos.

Antas, Almería

Capital de la Edad de Bronce
El Argar fue una cultura que se desarrolló en las ramblas de Antas en la edad de Bronce y una de las más avanzadas de Europa. Ver, pasear, sentir la antigüedad cuando pasamos por sus cuevas y estratos.

Y de repente, agua
El Cajete es una poza que se surte de manantial natural de agua al lado del río Antas, que parece brotar entre las rocas y que sorprende por su frialdad, incluso en los meses de verano

La Real
Una construcción de principios de siglo XX para uso industrial se salvó en parte para convertirse en uno de los iconos mas reconocibles de Antas. Un acueducto que saluda al viajero al llegar al municipio.

Parada y fonda
Podemos reponer fuerzas, tomando el paseo del huerto hasta llegar a El Sur, un coqueto local regentado por un matrimonio que vino de Uruguay para enamorarse de Antas y a la cervecería Frandi, una apuesta por los pintxos de inspiración vasca.

Localización: Antas

El Sur
Paseo del Huerto, 3
697 32 69 36