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El Festival de Folclore de Almería, 31 años de música y tradición

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Dicen que este año, quizá por la conmemoración del Milenio de Almería, quizá por el sentimiento -cada vez más extendido- del regionalismo almeriense, la Feria de Almería va a recuperar gran parte de las tradiciones perdidas. En román paladín, menos sevillanas y más refajonas. Parte de razón tienen lo que así piensan, y para muestra, está el primer concurso de indumentaria tradicional que se va a celebrar durante las fiestas, y del que pronto daremos más detalles. Pero el mejor ejemplo del esfuerzo que se está realizando para recuperar tradiciones almerienses es, sin duda, la recuperación del Festival de Folclore de la ciudad de Almería.

refajonas

La cita será en la Plaza Vieja, que acogerá, los días 21 y 22 de agosto, un evento que cumple 31 años, y que está consolidado como uno de los mejores a nivel nacional. Para esta ocasión, se contará con la presencia de grupos folclóricos procedentes de Senegal, Chile, Rusia o Perú. El capítulo de grupos nacionales lo asumen el conjunto murciano y, cómo no, el Grupo Municipal de FolcloreVirgen del Mar‘, con sello netamente almeriense, y que también mostrará al público el traje de la refajona, típico de Almería. ¡Ah! La entrada, como es costumbre, es gratis hasta completar aforo. ¡No lo dejes para última hora, que la Plaza Vieja se peta!

FESTIVAL DE FOLCLORE; GRUPOS Y PROGRAMA

21 de agosto: a partir de las 22.00 y por este orden, Grupo Municipal ‘Virgen del Mar’ (Almería), Conjunto Manavai de la Asociación Cultural Manavai Rapanui (Chile), Ballet Nacional Cosaco (Rusia).

22 de agosto: a partir de las 22.00 y por este orden; Grupo Municipal ‘Virgen del Mar’ (Almería), Compañía de Música y Danza Perú Ritmos y Costumbres (Perú), Grupo Folclórico San Juan Bautista de la Peña Huertana la Parranda de Beniaján (Murcia), Ballet Folclórico Jammu (Senegal).

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Sobre el autor

No hay cantina de ningún puerto donde este pirata no haya fondeado. Gran experto en la navegación nocturna, tiene una visión prodigiosa para avistar garitos en los que poder echar unos buenos tragos de ron. Su instinto innato para la fiesta nos lleva a los lugares más insólitos. Disfruta tanto de la noche como del día y cuando los primeros rayos de sol entran por los camarotes, este pirata se pone sus mejores galas para pasear por museos, librerías, exposiciones y salas de arte.