canteros y caciques 2024

Hornazos para el gran jueves del Bajo Andarax

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Las fechas de la Semana Santa siempre son muy fuguillas pues cambian cada año (Por decisión del Concilio de Nicea, la Pascua debe celebrarse el primer domingo después del plenilunio que sigue al equinoccio de primavera, y no puede ser anterior al 22 de marzo ni posterior al 25 de abril)
Bien, pues por ello, el jueves anterior al miércoles de ceniza, tienen a bien los pueblos del Bajo Andarax celebrar su Jueves Lardero (Lardero viene del latín: grasa) Como cebándose antes de lo periodos de abstinencia carnal de la cuaresma, es la excusa perfecta para comenzar de paso, la celebración del carnaval. En torno al hornazo, un bollo de aceite y con un huevo duro, dentro, tortillas, embutidos y vino del país hacen el resto de la fiesta entre familiares y vecinos. Estas son las recomendaciones piratas para este jueves 11 de febrero:

Benahadux
Los hornazos se llevan al impresionante paraje de las minas de La Partala, antigua industria del azufre y que con las ruinas al fondo de las instalaciones y los colores de la tierra sulfurosa hacen un espacio como de otro mundo.

Gádor
La comida campestre es en la rambla de La Balsa, en lo que se conoce como Las Chimeneícas. Un espacio, con los naranjos al lado y con sitio de sobra para sacar y compartir todas las viandas, incluidos los sabrosos papaviejos.

Pechina
Su parque de las Moreras, sitio donde pasaba el antiguo ferrocarril de Sierra Alhamilla es el espacio ideal para su jueves lardero.

Rioja
En Los Algarroberos es la cita en este pueblo de ramblas cinematográficas y que podremos conocer en este enlace.

Santa Fé de Mondújar
La tradición de los jueves larderos hacen subir a sus vecinos al Picacho y de paso, ver el espacio tan privilegiado entre las ramblas del Andarax y de Huéchar: un lugar del que se ya se prendieron nuestros antepasados de Los Millares. Para conocer mejor el pueblo, sigue este weeky enlace.

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Sobre el autor

Es el oteador de este galeón pirata. Catalejo en mano, nada más llegar a puerto, se adentra en terreno desconocido para descubrirnos enclaves espectaculares cuya existencia es ignorada, incluso, por los propios lugareños. Tiene el don de retratar en forma de dibujos aquello que ven sus ojos y que otros ni imaginan. Ahora bien, le pierden las fiestas populares y si coinciden con alguna de sus expediciones, su regreso puede durar días.