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Rioja: fantasmas y naranjas

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Propongo leer nuestra agenda de ocio de Almería y preparar un abordaje para piratas valientes que quieran enfrentarse a espectros y fantasmas…y comer buen pescado. ¿Estamos preparados? Pues nuestro destino es Rioja

El puente de los suspiros
El mítico cuello de botella de la nacional 340 que unía la capital con el centro (con la península casi, pues la sensación de isla era considerable…) pasó a la historia en el siglo XXI y es ahora un elemento arquitectónico más de este pueblo naranjero. Recomendable ir al puente que cruza el cauce del Andarax y hacer un ejercicio de memoria para contar a los más pequeños como se circulaba no hace muchos años. Seguro que se asombrarán.

Rioja,-puente Almería

Rioja

Fantasmas, chimeneas de hadas y más sorpresas
Los intrépidos piratas tienen como objetivo enfrentarse a unas caras de fantasmas que nos asaltarán en la rambla de los Arcos. Para ir, salimos desde la plaza de la constitución y por un senderillo al lado del Andarax, pasaremos bajo el puente antes citado y seguiremos para encontrarnos la rambla que pasa bajo la autovía y que nos lleva a conocer el paisaje caprichoso de esta zona. La erosión de un material emergido (esto era un mar tropical hace unos cuantos millones de años) compuesto por arenas y margas dejan formas como caras de fantasmas y hasta setas gigantes de piedra, que los geólogos, que a veces son poetas, llaman chimeneas de las hadas.

Parada y fonda
Entre el cansancio y el asombro reparar fuerzas es algo necesario y si nos pasamos por bares como Los Pirineos, nuestras fuerzas se habrán repuesto en un santiamén, con unos pescados frescos y con especial atención a sus calamares fritos, de los de verdad.

Rioja.-Almería

Rioja

Localización: Rioja

Los Pirineos
c/Félix Rodríguez de la Fuente, 18
950 31 02 79

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Sobre el autor

Es el oteador de este galeón pirata. Catalejo en mano, nada más llegar a puerto, se adentra en terreno desconocido para descubrirnos enclaves espectaculares cuya existencia es ignorada, incluso, por los propios lugareños. Tiene el don de retratar en forma de dibujos aquello que ven sus ojos y que otros ni imaginan. Ahora bien, le pierden las fiestas populares y si coinciden con alguna de sus expediciones, su regreso puede durar días.