Sierro, el refugio del pirata

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Hay pueblos donde se pasa camino de otros lugares y otros a los que hay que ir como destino. En la sierra de los Filabres, un ramal de la carretera del Almanzora nos desvía por Purchena, Suflí y como fin de camino, Sierro. Un pueblo que fue refugio en la revuelta morisca por ser casi inexpugnable, bien defendido desde su castillo y que hoy, con sus casitas blancas como un racimo, nos atrae como piratas a un abordaje lleno de cosas interesantes.

Sierro, Almería pueblo

Sierro

¡A por el castillo!
Al llegar a Sierro, podemos parar en su placita y comenzar a a ascender entre sus empinadas callejuelas hasta el castillejo que, a pesar de estar totalmente renovado, no deja de ser una gozada asomarnos por sus almenas y ver desde allí el valle del Almanzora o bien, asomarnos y gozar de una de las estampas rurales más pintorescas con un entramado urbano que nos asemeja a un pequeño nacimiento.Desde el castillo se toma un sendero que nos lleva al vecino pueblo de Bayarque, pasando por el bello barranco de la Mezquita.

Castillo Sierro, Almería

Sierro, Almería

 

¡Al río!
Desde la misma placita, tomamos el camino contrario y, cruzando por el puente, podremos bajar tras pasar un espantoso parking, por un caminito que nos lleva al arroyo que riega Sierro y que dependiendo de las épocas, generosa de aguas. Allí encontraremos los restos de un viejo molino árabe y en frente, una antigua almazara convertida en restaurante.

puente rio Sierro, Almería

Sierro

¡Al monte!
En la misma carretera de entrada a Sierro a nuestra izquierda podemos tomar uno de los caminos que mas gustan a los vecinos y caminantes que es el de La Cuesta Grande, un camino de herradura que juega con las vueltas que da el río Sierro.

 Sierro, Almería bajada castillo

Sierro

¡A las fiestas!
Por San Sebastián, el primer fin de semana de septiembre, son sus fiestas patronales donde realizan las Relaciones de moros y cristianos y en San Marcos, se toman el hornazo en familia en una primavera que viste de mil colores sus laderas. En Semana Santa, el viernes santo se llena de ramas y brotes verdes el suelo de la plaza mayor, en una curiosa representación.

Localización: Sierro

Para comer
Mesón Pan y Aceite
Antigua almazara
950107945
656681663

 

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Sobre el autor

Es el oteador de este galeón pirata. Catalejo en mano, nada más llegar a puerto, se adentra en terreno desconocido para descubrirnos enclaves espectaculares cuya existencia es ignorada, incluso, por los propios lugareños. Tiene el don de retratar en forma de dibujos aquello que ven sus ojos y que otros ni imaginan. Ahora bien, le pierden las fiestas populares y si coinciden con alguna de sus expediciones, su regreso puede durar días.