El Cerro de San Cristóbal, Almería es sin duda unos de los lugares más emblematicos de la ciudad.
Acabo de visitar el Cerro de San Cristóbal, uno de los lugares más emblemáticos de la ciudad de Almería, y os confieso que nado entre el éxtasis producido por unas vistas sin parangón, y el cabreo causado por la falta de civismo de algunos y la ausencia de implicación de todas las administraciones públicas desde el principio de los tiempos. Aunque empezaré hablando de lo bueno; las sombras de este monumento almeriense las dejamos para el final.
Ubicación
Y lo bueno, ¡qué bueno!; lo mejor del Cerro de San Cristóbal, Almería, sin duda, es su exclusiva ubicación, que regala al visitante un rincón famoso por brindar algunos de los mejores paisajes de toda la provincia. La Alcazaba y sus murallas milerias a tiro de pájaro, el puerto marítimo como nunca antes lo habías visto, el Cabo de Gata en todo su esplendor, la Sierra de Alhamilla… si te ocurre como a mí, verás detalles de todos estos atractivos en los que, seguramente, no habías caído antes de visitar este cerro de Almería.
Allí, una escultura de un Sagrado Corazón -hecho sobre 1930 pero rehabilitado no hace mucho- pone la nota cristiana a un entorno eminentemente árabe; desde la Alcazaba desciende hacia el norte, a través del Barranco de la Hoya, una línea de muralla musulmana que llega hasta el mismo Cerro de San Cristóbal. Dicha muralla de piedra fue construida en tiempos del rey Jairán en el siglo XI. Son los restos que quedan del amurallamiento del barrio de la musalla, que desde el cerro descendería por la actual calle Antonio Vico.
En el cerro, conocido en época musulmana como Monte Laham, se encuentran siete torreones, tres árabes de planta cuadrada y cuatro cristianos de planta semicircular, éstos construidos por los templarios de Alfonso VII, que hicieron del lugar un fuerte-capilla tras la conquista de la ciudad al mando de las tropas del rey cristiano.
Volviendo a nuestros días, no pierdas de vista nuestra agenda pirata; El Cerro de San Cristóbal en Almería se puede visitar cualquier en cualquier fecha a cualquier hora (no es un recinto cerrado), pero también tienes la opción de participar en alguna de las visitas guiadas que ha preparado el ayuntamiento almeriense de cara a este otoño. Además, si lo visitáis estos días, os encontraréis con un atractivo extra; el rodaje de la superproducción de cine ‘Clavius‘ se puede palpar desde este mirador.
Y ahora y muy a mi pesar, la nota negativa. Al fin y al cabo estamos en Almería, y no es ni la primera ni la última vez que se juntan el hambre con las ganas de comer. En este caso, unos ciudadanos -no pocos- con menos civismo que un corsario trasnochado y unas administraciones públicas que no sólo no ponen en valor lo mejor de nuestra tierra, sino que contribuyen activamente a su destrucción.
De verdad; a mí se me cae el alma al suelo cuando veo un rincón que, de estar en Granada o en Sevilla, luciría como los chorros de oro. Pero como no es así, el Cerro de San Cristóbal, Almería está repleto de excrementos caninos (sin descartar los humanos), cristales rotos, grafitis y orines. Por no hablar de muchas zonas de la murallas que están a punto de derrumbarse. Aunque uno ya no sabe si es mejor que intervengan, viendo las ocurrencias de algunos “expertos” para colocar acero corten sobre piedra milenaria.
A pesar de todo lo malo, insisto en que el Cerro de San Cristóbal, Almería te va regalar unas vistas sensacionales y una perspectiva de Almería que muchos quisieran para sus ciudades.
Localización: Cerro de San Cristóbal
Qué hacer en la ciudad de Almería. Te presentamos las mejores propuestas para que puedas descubrir los atractivos más interesantes de la ciudad y provincia.
4 comentarios
Pingback: Agenda cultural y de ocio pirata en Almería. Cuaderno de bitácora del 3 al 9 de noviembre - WEEKY
Pingback: El Centro de Interpretación Patrimonial más completo de la ciudad de Almería - WEEKY
Pingback: Agenda cultural y de ocio pirata de Almería. Cuaderno de bitácora del 24 al 30 de noviembre - WEEKY
Pingback: Ocho monumentos de Almería para presumir (y también para avergonzarse) - WEEKY